domingo, 4 de marzo de 2018

Consejo de redacción: marzo 2018


Parafraseaba ayer Soledad Gallego Díaz la frase de Gertrude Stein: Rosa es una rosa es una rosa es una rosa, que popularizó Mecano. Pues bien sigamos con la paráfrasis y digamos que blog es un blog, es un blog, es un blog.  Y que a algunos les afecta de vez en cuando la melancolía de los días sin luz y posiblemente la astenia propia de los primaverales. Los blogs andan en lívida decadencia –tan elegante, por cierto– ante la inmediatez de la redes y su toma y daca. Cuajados de onanistas o propagandistas, atraviesan un momento de desasosiego desconcertado. Y es preocupante. ¿O no? Lo veo en esta casa, en vuestros ojos, tan acostumbrados antes a escarbar en las migajas líricas de las tardes, a propiciar el encuentro con poetas amigos o con poetas, a filtrar alguna novedad o dar cuenta del estado de la cuestión. Esté blog, tómenle el pulso, también está enfermo en dudas. No sabe si es una rosa o una antigualla. O si alguien lo espera. Por eso este Consejo de Redacción en marzo. No sabemos lo que el destino trama, pero si alguno de ustedes encuentra trabajo –escribidor o lector– en la competencia, en las nuevas revistas-seta digitales, acéptenlo. Nos será difícil evitar el ere, estamos sobredimensionados para tan escasa productividad. Por menos llueve. Dijo el Jefe por el plasma. Sigue en Torrevieja.    

9 comentarios:

La Solateras dijo...

Por las redes o por el blog, te seguimos, Paco.

Mayusta dijo...

El blog es el blog.FB es un "kleenex". Demasiado ruido...

fcaro dijo...

El problema soy yo, Ana. Ya sabes.

fcaro dijo...

Pues tienes razón, Miguel Ángel. Demasiado ruido a veces.

Javier Díaz Gil dijo...

El blog sigue teniendo sentido querido Paco. Quizá sea el lugar donde dejar lo importante. Lo reflexivo, el poema, lo que sigue permaneciendo. Las redes van tan rápido que cualquier publicación pasa rápido y desapercibida y difícil de localizar. Mantén el blog. Muchos te lo agradeceremos. Más aún cuando llueve y falta la luz. Un abrazo, Paco

fcaro dijo...

Estoy contigo, Javier. Los blogs, son un refugio del sosiego. No son ningún problema cundo hay ánimo y cosas que decir. Algo haremos.

JOSÉ LUIS MORANTE dijo...

Querido Paco, con mis disculpas, no creo que el blog sea un asunto de onanistas ni propagandistas digitales sino una forma de compartir impresiones lectoras y creación propia... Es un enorme esfuerzo personal mantener a diario sus contenidos y apenas deja la gratitud de unas cuantas visitas y de comentarios reflexivos que convierten la entrada en un diálogo. Si eso no es así, yo también estoy equivocado y cerraré mis puentes de papel de inmediato. No sé si ser onanista es publicar un poema propio, y no sé si es ser propagandista hablar de un libro en el que has invertido tres años de trabajo. Una cosa es cierta: estamos en una sociedad tan absurda que parece más grave publicitar cultura que opinar sobre la estupidez generalizada de la clase política o sobre la marea independentista que desanda la convivencia... Malos tiempos para la lírica, sí; y para la inteligencia. Nuestro ahora demuestra que se puede vivir sin cerebro y además sin notarlo. Un gran abrazo, Paco, y gracias por tu reflexión.

fcaro dijo...

José Luis, me he permitido contestar en tu blog. Esto es una copia.
Querido José Luis, prefiero contestarte en tu blog tu comentario en el mío. Llevo casi tres meses sin colgar en Mientras la luz un entrada digna de tal nombre. Sin duda porque el esfuerzo de mantener un blog es grande y uno no está a veces para trotes. Te envidio, como envidio a otros muchos blogueros que dedican su tiempo y sus fuerzas a los demás, tú entre ellos y de los más activos. Por ti y por otros como tú sigo. Dignificas estos espacios frente a tantos que solamente ven en estas ventanas venta. (Sabes que existen). Difundir obra propia es una oportunidad legítima, siempre que -como tú y otros intentamos- se convierta en un diálogo con la obra de los demás. Puentes de papel es un ejemplo. No van por ahí los tiros míos, sino por el sofoco que produce mantener un blog, y tú lo sabes. A veces tomarse un respiro sin premeditarlo, como ha sido el mío, crea mala conciencia. Es mi caso. Algunos compañeros mantienen que defender los blogs son una señal de resistencia inteligente, que son un refugio para la reflexión y el sosiego. Para la amistad y lo cordial, que están lejos del griterío. También lo creo. No me voy. Espero superar el ere. Gracias por estar al quite de forma tan generosa. Mi abrazo.

Alfredo J Ramos dijo...

El blog resiste. Debe hacerlo Creo que lo más sensato es aprovechar la inmediatez de las redes sociales —FB, sobre todo—para revitalizarlo. Claro que tienen sentido. Lo que ocurre es que los tiempos no sólo están cambiando, son ya otra cosa. ¿Cuál? Eso queremos saber. Los blogs son para las redes dizque sociales lo que los libros impresos para los blogs. Y deben convivir. Lo harán. Aunque no sabemos hasta cuándo. Onanismos, propaganda, narcisismos. De todo eso hay y son marcas indelebles de la cultura del espectáculo, o meramente especular, en que vivimos desde al menos las décadas finales del pasado siglo (que, se olvida a menudo, no fue el XIX): pero inevitablemente nos hacemos no ya mayores sino póstumos (¡con tanto post!) y la realidad tiene ribetes de muy difícil asimilación. En resumen: mientras la luz dure, la seguiremos buscando.